Cuba. El 20 Congreso de la CTC

Haga cada quien lo que le corresponde…
• Durante el trabajo en comisiones los delegados
 expresaron su apoyo y solidaridad al Gobierno y al pueblo
 venezolanos ante las maniobras de la contrarrevolución
 por desestabilizar la hermana nación

Susana Lee, O. Fonticoba Gener, Lissy Rodríguez Guerrero y
 Lisandra Fariñas Acosta
Granma, Cuba 22 de febrero 2014

Las acciones del movimiento sindical para aumentar la eficiencia económica en sus unidades fueron el centro de los debates en la comisión número dos, que estuvo presidida por José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido y vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, y Ulises Guilarte de Nacimiento, presidente de la Comisión Organizadora del Congreso.


Los delegados reflexionaron sobre la necesidad de potenciar la atención integral y capacitación de los trabajadores y mantener una buena estimulación moral y material, pues esto, unido a las buenas relaciones entre los diferentes factores del centro laboral y la organización, son fundamentales para mejorar la productividad, como dijo el villaclareño Gerardo Sarduy.

 Similar opinión sostuvieron otros delegados al manifestar que la relación entre los cuadros y los trabajadores de la base es esencial para estimular las fuerzas laborales. Para ello, la asamblea de afiliados es el espacio ideal.

 Debemos sacarla de la formalidad, sostuvo Luis Manuel Castanedo, secretario de la CTC en la capital. No se trata de niveles de presencia, señaló, sino de participación, porque sin eso no hay compromiso con los planes y metas que nos trazamos. El principal problema de las asambleas es precisamente su calidad, además de que se necesitan más respuestas de la dirección administrativa; tenemos que salir de las consignas, comentó.

La eficiencia económica debe ser para Cuba una tarea de naturaleza estratégica, afirmó Ulises Guilarte de Nacimiento. La producción de riquezas, dijo, recae mayoritariamente sobre los trabajadores del sistema empresarial cubano; de modo que debemos usar métodos más creativos, alcanzar una mejor organización y disciplina laboral.

 Debemos estar cada vez más preparados, sostuvo, porque si no aportamos criterios que ayuden a la formulación de los planes, entonces no nos sentiremos comprometidos con su cumplimiento.

El sindicato debe prepararse, crearse una opinión para discutir con fuerza ante la administración, porque no siempre tenemos que estar de acuerdo, sobre todo cuando algo es injusto; por eso debemos hacerlo con argumentos sólidos, enfatizó.

 Sobre esta importante relación entre administración y sindicato el segundo secretario del Partido, José Ramón Machado Ventura, señaló que estas deben basarse en la cooperación para concretar los planes de la entidad y contribuir al esclarecimiento y solución de muchos problemas existentes en las organizaciones de base.

En las asambleas debe establecerse un diálogo claro con los trabajadores, ir perfilando lo que ellos desean y necesitan conocer. Es un espacio para exigir y comprenderse mutuamente. Se trata de no repetir errores pues lo que ambos persiguen es que el centro avance, añadió.

 Por un diálogo inteligente

La cancelación de un sello postal en ocasión del XX Congreso de la CTC, tuvo lugar ayer por la tarde en el Palacio de Convenciones. En la foto, Salvador Valdés Mesa, miembro del Buró Político y vicepresidente del Consejo de Estado, en el momento de acuñar y firmar varios ejemplares del sobre del primer día, actividad que realizaron igualmente Ulises Guilarte de Nacimiento, presidente de la Comisión Organizadora del evento; Maimir Mesa Ramos, ministro de Comunicaciones y Luis Martell Rosas, veterano dirigente sindical. Foto: José M. Correa


El movimiento sindical cubano demostró en los debates de ayer que se trata de hacer bien el trabajo, y cambiar la mentalidad en el propósito de obtener métodos más atractivos para influir en los jóvenes.

En la comisión dedicada al debate de los te-mas relacionados con el trabajo político e ideo-lógico se escucharon inquietudes referidas a la productividad, el combate contra el delito y las ilegalidades, el perfeccionamiento del trabajo en cada colectivo laboral, la necesidad de representar los derechos y deberes de los trabajadores, y de volver al estudio del pensamiento martiano y marxista, así como de aprender la historia del movimiento sindical.

 Presidido por Miguel Díaz-Canel Bermúdez, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, el encuentro fue propicio para que, de la voz de los delegados, surgiera la propuesta de apoyar el reclamo por la excarcelación de los nuestros héroes presos en cárceles norteamericanas.

 Benigno Rodríguez, delegado de la emisora Radio Coral, en la Sierra Maestra, se refirió a la importancia de reflejar más la labor de los trabajadores destacados en los medios de comunicación: "Le propongo a mi Congreso que se plantee como una prioridad el uso de los medios de comunicación. Cuando se pone el ejemplo de una persona que realiza una obra de impacto, el estímulo para ella es mucho mayor".

 Como parte de la delegación espirituana Juana María Blanco, quien está al frente de una unidad cañera, instó a potenciar el apoyo a los jóvenes, así como la atención a los trabajadores.

 Marianela Duflar de la Fuente, secretaria general de la sociedad mercantil ARTEX, reflexionó sobre la importancia de la instrucción de los líderes sindicales: "Definitivamente tenemos que recurrir a la cultura, a la autopreparación de los dirigentes sindicales en la historia de nuestro país, los discursos de José Martí, la historia de la música... Tenemos que lograr un diálogo diáfano, inteligente. Tenemos que cambiar porque han cambiado las formas del enemigo. Hoy nuestros jóvenes y nuestra patria necesitan de esas acciones".

Por su parte, Mireya del Llano Prieto, delegada por la provincia de Artemisa, propuso aprovechar las Tecnologías de la Información y la Comunicación, las páginas personales y blogs, para llevar la verdad de Cuba a todas partes del mundo.

En las palabras conclusivas Díaz-Canel llamó a desarrollar una combatividad consciente contra la indisciplina, la ilegalidad, el desorden y la inatención. Instó a propiciar un espacio de diálogo, saber escuchar, trabajar con integralidad y sistematicidad, no dejar acumular problemas que creen descontento, y aprovechar la inteligencia colectiva.

El primer vicepresidente explicó que el sector no estatal en Cuba es un complemento de la economía, y que se le ha pedido al Ministerio de Educación Superior y al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social la organización de plataformas para la preparación de los cuentapropistas, de manera que la fuerza productiva de ese sector esté altamente calificada.

El trabajo político-ideológico en el movimiento obrero se traduce en producir con calidad y eficiencia —refirió Díaz-Canel—, "es tener una mentalidad de ahorradores, es tener una mentalidad de productores y exportadores. (... ) es trabajar por fomentar los conocimientos de nuestra cultura y de nuestra historia, (... ) es defender el plan, es atender a los trabajadores, es defender la calidad en la producción y en los servicios, es aplicar la ciencia y la técnica, potenciar la empresa estatal, la adecuada relación con el sector no estatal de la economía, (... ) es reducir los gastos, es vincularse con la base, es afiliar".

 PARA QUE TODO FUNCIONE

 Asuntos como la sindicalización y el papel de la asamblea de afiliados y de representantes, concentraron parte significativa del debate de-sarrollado ayer en la Comisión número uno del XX Congreso de la CTC, que trató el funcionamiento del Sindicato, premisa imprescindible para elevar su papel de representante de los trabajadores, capacidad de convocatoria y movilización.

La sesión, en la que participaron 350 delegados de todos los sindicatos y territorios, estuvo presidida por Salvador Valdés Mesa, miembro del Buró Político y vicepresidente del Consejo de Estado; Abelardo Álvarez Gil, integrante del Secretariado del Comité Central, y Carmen Rosa López Rodríguez, vicepresidenta de la Comisión Organizadora de la importante cita, quien condujo las deliberaciones.

En esta segunda jornada del XX Congreso, que trabajó en la sala 3 del Palacio de Convenciones, se produjeron 29 intervenciones de los participantes, entre ellos de dirigentes sindicales del sector no estatal que transmitieron sus experiencias, sobre todo relacionadas con el proceso de afiliación de trabajadores que laboran en las nuevas formas de gestión.

De forma franca los delegados se refirieron a inquietudes que los trabajadores de sus organizaciones de base plantearon en el transcurso del análisis del Documento Base del Congreso, así como en asambleas de afiliados y en la consulta del Anteproyecto de Código de Trabajo. Entre ellas estuvieron las referidas al papel del sindicato en los colectivos laborales; la selección de los más idóneos para dirigir la labor sindical; la exigencia de la organización sindical a las administraciones acerca de la evaluación periódica de los trabajadores; la capacitación de los ejecutivos sindicales para que puedan desarrollar mejor su actividad; el funcionamiento de la ANIR; así como la emulación y la estimulación moral y material a quienes obtengan resultados superiores.

En torno a algunos temas formulados, tanto Valdés Mesa como Carmen Rosa precisaron conceptos y esclarecieron preocupaciones, varias de las cuales ya se encuentran recogidas en el proyecto de dictamen de la propia comisión y en los Objetivos de Trabajo que hoy serán sometidos a la aprobación del Congreso.

 EN LA PRODUCCIÓN ESTÁ LA CLAVE

La necesaria vinculación de los trabajadores a su área productiva como única garantía para elevar sus ingresos, y la atención al hombre, fueron premisas debatidas hoy en la comisión tres del XX Congreso Obrero, encargada del análisis de la representación y atención de los trabajadores y los desafíos que enfrenta el sindicato ante las nuevas formas de gestión en el escenario laboral cubano.

En sus más de treinta intervenciones, los afiliados desarrollaron un fructífero debate que tocó temas cruciales para el movimiento obrero como el perfeccionamiento de las condiciones de trabajo, la seguridad ambiental y la salud laboral, la accidentabilidad, los convenios colectivos y la representación de los trabajadores por cuenta propia.

 Sobre la relevancia del estipendio para la alimentación de los trabajadores, y su reflejo en la calidad del proceso productivo, habló en representación del sindicato de la Ciencia, Georgina Bonilla, quien enfatizó en que aún no se logra que se le dé realmente ese uso a este dinero, precisamente por las insuficiencias que aún persisten con el salario.

La delegada enfatizó además en la necesaria atención que debe ponerse en la conciliación y contratación de los medios de protección para los trabajadores, en la ejecución correcta de los presupuestos, y en las insatisfacciones con los chequeos médicos especializados fundamentalmente para quienes laboran en áreas de riesgo.

Al respecto, aclaró José Ángel Portal Mi-randa, viceministro primero de Salud Pública, que debe exigírsele más a las administraciones, porque las capacidades en el sistema de salud para la demanda están creadas. "No será por falta de tecnología ni recursos humanos que no se atienda al pueblo trabajador. Solamente para este año se invertirán 53 millones de dólares en tecnología y más de 47 millones en piezas de repuesto".

 Fueron planteadas disímiles preocupaciones, que van desde elevar el sentido de pertenencia de los trabajadores, hasta el aprovechamiento de los recursos, de manera que estos se reviertan en mayores utilidades y estimulación.

 Jorge San Luis Medina, de la provincia de Cienfuegos, y representante de una UBPC ganadera, manifestó su inquietud por los reiterados incumplimientos de pagos. "¿Hasta cuándo vamos a estar atados los agropecuarios? Tenemos un compromiso que cumplir con el pueblo, que espera y necesita productos y alimentos en su mesa, a precios asequibles".

El delegado recordó que es necesario hacer valer los contratos para seguridad de los trabajadores. "No es posible que el país haya invertido 116 millones de pesos en rescatar 374 UBPC que eran ineficientes, y aún no hayamos tenido capacidad de respuesta", puntualizó.

Por su parte Orestes Ávila Velásquez, perteneciente a una UBPC cañera en la provincia de Ciego de Ávila, llamó la atención sobre diversos problemas que enfrenta hoy la industria agroazucarera. "Además de los insumos, ha faltado la voluntad de los hombres y ha existido un mal manejo tanto de las variedades como de las cepas". También, dijo, "han sido insuficientes las labores en la preparación de las tierras y la siembra de caña".

 Agregó que la recuperación de las áreas abandonadas y los terrenos infestados de marabú, son acciones esenciales en la revitalización de este renglón, de vital importancia para el país.

 Sobre las nuevas formas de gestión no estatal y la inserción en el trabajo sindical de los cuentapropistas, se generó una rica discusión, que abordó las acciones para fortalecer los valores y la participación política y social de estos, y reconocer sus aportes al desarrollo económico y social del país.

De la provincia de Santiago de Cuba, Ricardo Veranes Carrión habló a nombre de la cooperativa constructora de la que forma parte. Resaltó que las nuevas cooperativas no agropecuarias tienen la misión de aportar al presupuesto del Estado sin generar gastos ni representar una carga, y esto solo se logra con producción, disciplina y calidad.

Al respecto, la viceministra del Ministerio de Comercio Interior, Bárbara Acosta, apuntó que hoy existen 270 cooperativas no agropecuarias aprobadas y funcionando, y destacó el papel de la cooperativa constructora de San-tiago en el apoyo a obras sociales y la construcción de viviendas.

El imperativo de que se eliminen las ilegalidades en el sector no estatal, fue otro de los puntos abordados. El matancero Osmal Ramírez, reflexionó sobre el hecho de que mientras hay trabajadores que cumplen con sus impuestos, hay otros que trabajan en la ilegalidad. En ese sentido, dijo que los cuerpos de inspectores tienen una responsabilidad que cumplir al respecto, y muchas veces manifiestan falta de profesionalidad.

La preocupación sobre la ausencia de un mercado mayorista en muchas de las áreas, y la adecuación de los precios, así como la necesidad de que los trabajadores sean realmente escuchados por sus dirigentes y los organismos que deben dar respuesta con celeridad, fueron otras de las inquietudes manifestadas.

 Igualmente debatieron sobre la educación y cultura tributaria, el control fiscal y las insuficientes labores de capacitación que hoy se realizan a los trabajadores en estos temas.

 Opiniones encontradas en cuanto a independizar a los trabajadores no estatales en un sindicato propio, fueron fuente de polémica en el encuentro. Antonio Agustín Villafaña, del sindicato de la Cultura de La Habana, opinó que no pueden verse los cuentapropistas como algo aparte, pues forman parte del pueblo trabajador que es uno solo, y llamó a mantener la concepción del sindicato que defendió Lázaro Peña

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